Cómo hacer que la jardinería sea divertida para las niñas y los niños

    ¡Descubre cómo hacer que la jardinería sea divertida!

    Inculca el amor por la naturaleza a los más jóvenes con dulces actividades de jardinería que pueden ser tan divertidas como fructíferas…

    Numerosos estudios demuestran que relacionarse con la naturaleza tiene multitud de beneficios para los seres humanos, independientemente de su edad. ¿Y sabes cuál es una maravillosa forma de despertar el interés por la naturaleza desde una edad temprana? Adivinaste: la jardinería.

    Y no te preocupes, no necesitas un gran espacio exterior para empezar. Puedes cultivar en las bases de las ventanas, mesas, balcones, jardineras elevadas y mucho más. Lo que importa de verdad es que tú y tu peque se diviertan aprendiendo jardinería. Y recuerda: ¡cada planta que no prospera es una oportunidad de aprendizaje! ¿Verdad que sí?

    Empieza poco a poco

    Dice el viejo refrán que “de pequeñas bellotas crecen grandes robles”, y esto es especialmente cierto hablando de jardinería. Empieza poco a poco, probando semillas que den a tu peque un resultado rápido.

    Cultivar comestibles puede ser una divertida manera de animar a los más jóvenes a entusiasmarse tanto por cultivar como por comer: una fórmula ganadora para hacer que tanto la jardinería como la hora de comer sean divertidas. Los berros son muy fáciles de cultivar y, si sabes cómo hacerlo, puedes convertirlos en una divertida peluca para un personaje. Dibuja una cara en una cáscara de huevo vacía y enjuagada usando plumones, rellénala con un poco de tierra, espolvorea algunas semillas, riega todo y, como por arte de magia, ¡al personaje le crecerá una original “cabellera”!

    Lo mejor es que tu niña o niño puede cortarle el pelo a su nuevo amigo con unas tijeras de seguridad. (Casualmente, también tenemos algunos consejos divertidos sobre los primeros cortes de pelo aquí). Cuando estés listo para comer los berros, solo tienes que cortar los sabrosos brotes para usarlos en ensaladas o sándwiches.

    Otras semillas fáciles de sembrar para los niños son las de girasol. Su rápido crecimiento resulta muy alentador y son bastante indulgentes al necesitar muy poco mantenimiento (lo que las hace ideales para un joven jardinero que podría olvidarse de regarlas…). Si tienes más de un niño, o si planeas involucrar a sus amigos, ¿por qué no creas una competencia para ver quién logra cultivar el girasol más alto? Puedes crear varias categorías para que cada niño gane un premio, ¡pero eso lo dejamos a tu elección!

    Fiesta de plantas

    Una vez que hayas dominado lo básico, es hora de pasar a la jardinería más avanzada: ¡las plantas! Si tienes espacio para cultivar, tanto física como metafóricamente, crear un colorido huerto con tu peque puede ser muy gratificante. Si no cuentas con superficies al aire libre, puedes probar con una jardinera o una maceta de interiores que serán igual de divertidas.

    Anima a tus retoños a participar en cada paso del camino investigando juntos sobre las plantas y proponiendo una combinación de distintos colores y formas que les gusten. ¡Incluso podrían planificar la plantación usando plantas y flores LEGO® DUPLO® para ver qué les parecen los resultados previstos!

    ¿Sabías que también puedes cultivar plantas centradas en un tema en particular para hacerlas aún más interesantes? A los niños les encanta dar rienda suelta a sus ideas más salvajes, y un jardín con vibras de pizza es un excelente ejemplo de eso. Solo hacen falta dos plantas que podrás en cualquier supermercado durante el verano: tomateras y albahaca. Por suerte, estas dos especies son las mejores compañeras de huerto y crecer una al lado de la otra las hace muy felices. Organiza la albahaca alrededor de la base de las tomateras y planta todo el conjunto en una composta de buena calidad. Coloca el huerto en un rincón soleado y mantenlo bien regado. Alrededor del mes de julio, podrán recoger su primera cosecha. Con una base para pizza y algo de queso, podrás preparar el esperado plato. ¡Buen provecho!

    Bichos, mariposas y abejas

    Parte de la razón por la que la jardinería es tan maravillosa es que crea un mundo para todo tipo de criaturitas especiales. A los peques les encanta ver abejas y mariposas disfrutando de lo que han cultivado, ¡así que puede ser divertido adaptar sus técnicas de jardinería para atraer a los bichitos!

    Los niños mayores podrían incluso hacer un hotel para bichos usando manojos de recortes de bambú o palitos que dé lugar a conversaciones sobre nuestro cambiante mundo. A las niñas y los niños les encanta aprender sobre la naturaleza, y saciar esa sed de saber también hace maravillas por el desarrollo de sus habilidades de CE.

    A los más jóvenes quizá solo les guste mirar las vistosas mariposas (¿y a quién no?) y contar las que puedan ver. Para facilitar las cosas, elige plantas que les gusten a estas amigas revoloteadoras, como la lavanda, las prímulas, el aciano y la mejorana.
    Cuando veas que a tu ropa y tus manos lo les caben más manchas de tierra, ¡recuerda que en el futuro podrías añorar ese día! Esperamos que hayas encontrado algunas ideas que probar y, si es así, nos encantará ver tus creaciones: ¡etiquétanos en las redes sociales!

    ¿Está lloviendo? ¡No te preocupes! Juega a la jardinería con tu peque usando los sets Huerto Orgánico LEGO DUPLO Mi Primer y Jardín y Casa del Árbol de Peppa LEGO DUPLO.